Ya escuché, ya banqué, lo que nadie se imagina.
Todo está, todo va, más que nada en el camino.
Y ahora estoy en mi lugar; no hay nada que perder, salvo vos.
No te puedo aconsejar, no te puedo sacar de ahí, salvo vos.
Ya entendí, ya logré, que el camino se ajustara.
Todo está, todo vuelve, todo más que nada sufre.
Y ahora estoy en mi lugar, no hay nada que perder, salvo vos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario